EL personaje del Duque de Lerma, controvertido e interesante. Os presento el protagonista de mi novela “El trono de barro”.
El poeta de la libertad Miguel Hernández
Hoy 30 de octubre nació Miguel Hernández. Un gran poeta que tuvo una fuerte influencia en el desarrollo poético en España. ¡Os cuento su historia, sus comienzos y la transformación que supuso en la literatura de la época!
La amistad en los libros y en la vida real
La amistad es uno de los leitmotiv de la literatura y se encuentra en todo tipo de novelas y géneros. Tanto como elemento central, sobre el cual se construye la trama, así como constituyente secundario, para darle forma a la historia que estamos contando, o con el fin de desarrollar el carácter individual y las relaciones entre los personajes que componen nuestra trama. La razón por la que muchos escritores literarios han tratado el tema de la amistad es que es un punto central en nuestra vida cotidiana. Los grandes autores de todas las épocas no han podido evitar tener en alta consideración este sentimiento, que es uno de los valores fundamentales del ser humano. Caracterizada por un afecto mutuo, la amistad tiene una fuerte carga emocional que marca los cimientos de la vida social. Asimismo, antiguos filósofos que, en un principio, parecen ser sabios austeros, viviendo retirados en sus jardines y perdidos en sus pensamientos, terminan apreciando el valor de la amistad a lo largo de sus reflexiones. Un claro paradigma de esto es Epicuro. Para él, la amistad termina siendo un bien natural y necesario para el cuerpo y el alma. Tanto para la supervivencia, ya que cubre la necesidad de seguridad de cada ser humano, como para la felicidad personal, porque hace que no nos sintamos solos. Como él mismo escribe en “Las Máximas Capitales”: De los bienes que la sabiduría procura para la felicidad de una vida entera, el mayor, con mucho, es la adquisición de la amistad. El Día Internacional de la Amistad Tan importante es el concepto de amistad que la humanidad le ha dedicado una fecha especial para celebrarla. Se ha establecido una fecha a lo largo de este mes, el 30 de julio, de forma oficial, y se festeja internacionalmente por designación de la Asamblea de Naciones Unidas desde el año 2011. El énfasis de la organización se basa en fomentar la amistad entre los pueblos, las culturas y los distintos países. La idea es tender puentes entre estos, ya que nuestras diferencias no son motivo de separación, sino de entendimiento y unión. La amistad es entendida como un conjunto de valores que vale la pena promover, como la lealtad, el respeto, la confianza y la camaradería. Personalmente, creo que, hoy en día, se ha perdido la esencia y el valor de lo que representa una amistad verdadera. Las personas suelen confundir conocidos, con los que se tiene un buen trato, con un amigo real. Por este motivo, es crucial recordar los valores que conforman a este concepto y, sobre todo, hacer memoria acerca de esas personas que han estado allí para nosotros en los momentos difíciles, al igual que en los felices, ya que la amistad es un elemento imprescindible, tanto en la vida personal como en las novelas que escribimos y leemos. La amistad en la literatura Como hemos visto, ya desde la antigüedad se concebía la importancia de dicho sentimiento, ya fuera en obras de carácter filosófico o en tratados que analizaban el concepto de la amistad. En efecto, por nombrar uno, el gran retórico romano Cicerón, le dedica una obra entera, conocida como “De Amicitia“. En la misma, trata los diferentes matices de la amistad, exaltando la importancia de este sentimiento en las relaciones sociales y en la política romana. No solo los escritores del pasado han enfocado su atención en este tipo de relación humana. De hecho, un gran número de obras contienen amistades destacadas. Entre ellas, se distinguen muchísimas novelas. Os nombro solo tres entre tantas: “Reencuentro” En esta novela, Fred Uhlman cuenta la amistad entre Hans y Konradin. Una amistad que va más allá de la religión y las tensiones políticas de la época. El primero es un judío burgués de una familia de altos valores morales, mientras que el segundo, un aristócrata alemán que oculta a su amigo, avergonzado, el profundo odio racial que cultiva su familia. Sus afinidades alimentan una hermosa amistad que se ve afectada por el contexto que ambos viven. “Harry Potter” La genial novela fantástica de J.K. Rowling aborda temas actuales y reales en un mundo imaginario poblado por magos, hechiceros y seres fantásticos. El hilo principal que mueve la serie de novelas es la amistad entre Harry, Ron y Hermione, tres jóvenes magos que crecerán y aprenderán nuevas cosas, enfrentándose juntos a obstáculos colosales. “Sherlock Holmes” El famoso detective, nacido de la pluma del brillante Arthur Conan Doyle, no podría llegar a la solución de sus enigmas sin el apoyo del doctor Watson. Contrito e inadaptado, sigue siendo él mismo, pero Watson consigue humanizarlo: el doctor ve a través de su armadura y decide permanecer a su lado, incluso cuando Sherlock muestra su peor lado. Una amistad sincera, casi nunca mencionada, una nota de ternura en el rudo mundo del detective más famoso del mundo. La amistad en mis novelas Yo, como escritor, no he sido menos, ya que en todas mis novelas, el tema de la amistad está presente y es un importante elemento que afecta a los personajes y a la trama. En “La boca del Diablo“, entre otras, se presenta una amistad inicial entre Juan Lobo y Fray Bernardo. Dicha relación va creciendo de manera gradual, y también se crea un vínculo del estilo discípulo y alumno. Mientras que, en “El trono de barro“, por poner otro ejemplo, la amistad juega un papel muy significativo. El personaje Francisco de Sandoval logra mantenerse como miembro de la Corte durante muchos años gracias al incondicional apoyo de varios de sus amigos. Una vez en el poder, él promete recompensarlos generosamente como forma de agradecimiento. La amistad no se queda solo dentro de los libros, sino que tiene un fuerte impacto en la misma vida de los escritores que, a menudo, encuentran en el apoyo de sus amigos un elemento indispensable para la creación de sus obras. La amistad a la hora de escribir En mi experiencia personal, fue gracias a un amigo el motivo por el cual comencé
El ajedrez y la literatura
Este mes celebraremos el día internacional del ajedrez (o, como veremos, uno de los días entre los que se contiende). Por esta razón, trataré la relación entre la literatura y este increíble juego de estrategia. De hecho, numerosas son las obras literarias en las que el ajedrez se presenta como su protagonista, o en las que una partida de ajedrez modifica para siempre el desenlace y la suerte de sus personajes. Se trata de una temática que ha despertado un enorme interés en una gran cantidad de autores, tan diversos como Vladimir Nabokov, con su novela “La Defensa”, basada en la vida de un maestro de ajedrez alemán, Curt Von Bardeleben. También en la obra del prolífico escritor español, Lope de Vega, se encuentra presente el afamado juego, plasmado en su obra teatral “Fuente ovejuna”. Arturo Pérez-Reverte, asimismo, contribuye con su aporte de este juego en la literatura, con su libro titulado “La tabla de Flandes”, una trama que entrelaza a la novela histórica con el género policial, en la que una restauradora de arte descubre un mensaje oculto en forma de partida de ajedrez sobre un lienzo. Yo mismo he escrito un libro en el que dicho juego de estrategia cambia el destino de sus personajes. Mi novela, “La predicción del astrólogo”, se centra en la Corte de Sevilla, donde, tras la caída del Califato de Córdoba, diversos reinos se han disgregado y se disputan entre ellos el gobierno de la península. ¿Cuál es el rol protagonista del ajedrez en esta novela? Solo hay una manera para descubrirlo… ¡Leerla! El Día Mundial del Ajedrez El ajedrez es un juego de estrategia que consiste en el enfrentamiento por parte de dos jugadores. Cada uno posee 16 piezas, de las cuales, cada una de ellas posee un valor diferente. Dichas piezas se pueden mover, siguiendo una serie de reglas específicas, sobre un tablero que se encuentra dividido en dos: cuadrados blancos y negros. El objetivo principal del juego es derrotar al Rey del antagonista. Este que os acabo de describir es el ajedrez clásico, pero hay muchos tipos diferentes de ajedrez. Según datos de Naciones Unidas, en la actualidad se registran más de dos mil variaciones del juego. Un gran dilema, pero no el único, ya que otra de las cuestiones que rondan alrededor de dicho juego es en cuanto a la fecha en la que se celebra (o debería celebrarse) el Día del Ajedrez. La disputa es entre el 20 de julio o el 19 de noviembre. La Asamblea General de Naciones Unidas proclamó hoy, 20 de julio, como Día Mundial del Ajedrez, para conmemorar la fecha de la fundación de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE), que tuvo lugar en París, en el año 1924. Sin embargo, fue la misma Federación la que designó que el Día Internacional de Ajedrez debía ser el 19 de noviembre, como forma de honrar al ajedrecista cubano José Raúl Capablanca, campeón mundial de este deporte desde 1921 hasta 1927. Borges y el infinito El aclamado escritor argentino, Jorge Luis Borges, le ha dedicado poemas y numerosas menciones en sus cuentos a este juego de estrategia. En su emblemático poema “Ajedrez”, publicado en el libro “El Hacedor”, realiza una analogía entre el tablero de ajedrez, sus piezas y las personas que habitamos este mundo. Cito un extracto de este poema para que se aprecie de forma explícita la intención de Borges y el uso de los elementos mencionados anteriormente y la relación existente entre ellos y el ajedrez: “ No saben que la mano señalada del jugador gobierna su destino, no saben que un rigor adamantino sujeta su albedrío y su jornada. También el jugador es prisionero (la sentencia es de Omar) de otro tablero de negras noches y de blancos días. Dios mueve al jugador, y éste, la pieza. ¿Qué Dios detrás de Dios la trama empieza de polvo y tiempo y sueño y agonía? “ En estos versos, el autor hace alusión a que, quizás, las personas seamos piezas de un juego, de un todo mucho más grande de lo que podemos comprender, y estamos siendo movilizadas en el tablero por algún Dios o entidad superior. El tablero es utilizado como representación de un escenario, que puede ser cualquier lugar donde nos hallemos. Este simboliza al universo y a la infinitud del mismo. El ajedrez y la cultura popular El año pasado, la famosa plataforma de streaming, Netflix, lanzó la serie “Gambito de dama” a la que, en principio, no muchas personas le tenían fe al tratarse de una niña que jugaba al ajedrez, y, a primera vista, una serie que radicaba en observar a alguien practicando este juego no aparentaba ser demasiado entretenida. Hasta que, finalmente, la serie batió récords y se convirtió en el mayor éxito de la plataforma hasta el día de hoy, con 62 millones de reproducciones a nivel mundial. Y, realmente, esta serie no es nada más que la adaptación a la pantalla de la novela de Walter Tevis, escrita en 1983. El argumento original trata de la apertura de ajedrez titulada como gambito de dama, utilizada por Beth Harmon, la protagonista. La novela narra la historia de Harmon, quien tiene una vida complicada al haber sido abandonada en un orfanato. Su rutina dentro del mismo es monótona y un tanto aburrida, hasta que, un día, nota cómo el conserje del establecimiento, en sus tiempos libres, se dedica a jugar al ajedrez. La particularidad es que juega solo y esto llama la atención de la niña, quien le insiste hasta el cansancio que le enseñe a jugar. Harmon termina convirtiéndose en una hábil jugadora de ajedrez y, a la edad de 16 años, comienza a competir alrededor del mundo, obteniendo muchísimas victorias. La novela se destacó por ser cautivante y muy precisa en el empleo de términos técnicos. Tevis basó las partidas de ajedrez en su propia experiencia y conocimiento sobre el juego. Una forma de creatividad El ajedrez combina elementos del deporte, del
El detective de ficción, 2ª parte. Plantilla para crear un buen detective
Hola, amigos. Hoy os traigo una plantilla para ayudaros a crear un buen detective. Lo mismo que es fundamental planificar nuestra novela, también lo es planificar la construcción de nuestros personajes. Sobre todo, el de nuestro detective. Antes de empezar el Método PEN, yo no sabía que era tan importante la creación de un personaje, pero lo es. Así que vamos a ver cómo hacerlo bien. Conocer a tu personaje Lo primero que tienes que saber para crear a un buen detective es que tienes que cocerlo muy bien. Si alguien te pregunta cuándo nació, sus gustos literarios, o si usa gafas o lentillas, tienes que saber las respuestas a la perfección. ¿Y cómo se consigue eso? Pues de una manera muy fácil: haciendo preguntas a tu detective. Sí, sí, no pongas esa cara. Coge papel y boli, siéntate frente a tu detective y empieza a preguntar y crea una plantilla para crear un buen detective. Es aconsejable separar las preguntas por temas, más que nada, para no repetirlas. Por ejemplo: Datos básicos ¿Es hombre o mujer? ¿Cómo se llama? ¿Cuándo nació? ¿Fecha? ¿Dónde? ¿Ciudad, país? ¿Qué edad tiene? ¿Dónde vive actualmente? ¿Quiénes son (o fueron) sus padres? ¿Tiene hermanos? ¿Está casado? ¿Tiene hijos? ¿Qué edad tienen? ¿Tiene mascotas? ¿Tiene coche? Aunque algunas preguntas os puedan parecer ridículas o que no tienen nada que ver con la novela, para crear un buen detective tienes que ser su mejor amigo, con lo cual, ninguna pregunta sobra. Y eso incluye, por ejemplo, sus gustos. Piensa en qué preguntas le harías en este campo. En nuestra plantilla para crear un buen detective encontrarás algunas. Gustos ¿Qué aficiones tiene? ¿Le gusta leer? ¿Cuál es su libro favorito? ¿Y su color? ¿Qué tipo de música le gusta? ¿Su película favorita? ¿Es vegetariano? ¿Cuál es su idea de buen entretenimiento: música, películas, arte, etc.? ¿Practica deporte o lleva una vida sedentaria? ¿Sueño profundo o ligero? ¿Es espontáneo o siempre necesita planear? ¿Qué redes sociales usa más? Otro aspecto a tener en cuenta es cómo fue su niñez. Vale, ya sé que ahora mismo estás mirando la pantalla pensando que estoy loca. Yo miré a Teo de la misma manera cuando nos lo contó, pero es importante. Y lo es porque, cualquier cosa que le ocurriera en esa etapa, sin duda marcará su conducta en la actualidad. Así que añade tantas como se te ocurran a nuestra plantilla para crear un buen detective. Crecimiento ¿Cómo describiría su infancia en general? ¿Fue feliz? ¿Por quién fue educado y criado? ¿Tiene algún trauma de la infancia? ¿Cuál es su recuerdo familiar más feliz? ¿Qué estudios tiene? ¿Cómo fue su juventud? ¿Era buen estudiante? ¿Tiene alguna carrera universitaria? ¿Hizo el servicio militar? ¿Habla algún idioma? Un aspecto a tener en cuenta, y que siempre es importante para crear un buen detective, es el aspecto físico, porque a todos los lectores nos gusta saber cómo ve el autor a sus personajes. En nuestra plantilla para crear un buen detective vamos a incluir algunos de estos elementos, porque no podemos dejar de lado cómo es, tanto en su físico como en su carácter. Características fisicas ¿Cuánto mide? ¿Cuánto pesa? ¿De qué raza es? ¿El color de sus ojos? ¿Cómo tiene el pelo? ¿Usa gafas o lentes de contacto? ¿Lleva barba, bigote, perilla? ¿Tiene alguna cicatriz? ¿Es diestro, zurdo o ambidiestro? ¿Lleva fotografías de su familia? ¿Fuma? ¿Bebe? ¿Cómo viste? ¿Tiene alguna frase o coletilla característica al hablar? ¿Es malhablado? ¿Se muerde las uñas? Caracteríticas emocionales ¿Cómo es su autoestima? ¿Cuál es su mayor defecto? ¿Cuál es su mayor virtud? ¿Basa sus decisiones en emociones o en lógica? ¿Qué le hace ser vulnerable? ¿Es sensible? ¿Cariñoso? ¿Es frío? ¿Es cauteloso o atrevido? ¿Introvertido o extrovertido? ¿Es optimista o pesimista? ¿Tiene seguridad en sí mismo? ¿Qué le impide conseguir sus objetivos? ¿Cuál es su punto fuerte y su punto débil? ¿Qué le motiva? ¿Qué le asusta? ¿Es generalmente cortés o rudo? ¿Discrimina o tiene prejuicios? ¿Cuál es su mayor fortaleza como persona? ¿Cuál es su mayor debilidad? ¿Qué tres palabras describen mejor su personalidad? ¿Qué tres palabras usarían los otros para describirle? También es muy importante, a la hora de crear un buen detective, saber cómo se relaciona con las personas, tanto a nivel personal como profesional. Lo es en todos los personajes pero, sobre todo, en el detective. Es importante saber cómo va a tratar a los sospechosos, al criminal, a las víctimas, etc. Por ese motivo, este es uno de los campos obligatorios en nuestra plantilla para crear un buen detective. Relaciones con otros En general, ¿cómo trata a los otros: atentamente, de forma ruda, manteniéndolos a distancia, etc.? ¿Es una persona social? ¿Quién es la persona más importante en su vida y por qué? ¿Quién es la persona en el mundo en la que más confía? ¿Y quién es la persona en el mundo a la que más admira? ¿Quién es la persona a la que más teme? ¿Quiénes son sus amigos? ¿Cuán cerca está de su familia? ¿Confía en alguien para protegerle? ¿Quién y por qué? ¿Quién es la persona a la que más desprecia o no soporta, y por qué? ¿Le gusta discutir o es de los que evade las peleas? ¿Tiende a tomar el rol de liderazgo en situaciones de peligro? ¿Le gusta el contacto físico? Y, cómo no, para crear un buen detective, debes conocer sus más íntimos secretos y creencias. Claro que sí. Es importante saber si hay “algo” que pueda, en un momento dado, desestabilizarle o impedir que cumpla con su deber. En nuestra plantilla para crear un buen detective, verás algunas de las preguntas que puedes hacerle. Secretos ¿Tiene alguna fobia? ¿Qué vicios tiene? ¿Qué es de lo que más se avergüenza o arrepiente de haber hecho? ¿Cuál fue su experiencia más vergonzosa? ¿Qué cambiaría de su físico? ¿Cuál ha sido su mayor mentira? ¿Cuál ha sido su mayor error? ¿Y su mayor secreto? ¿Cuál es su mayor manía? ¿Su peor pesadilla? ¿Su vocación
Hablando de libros para este verano
El verano y las vacaciones pueden significar distintas cosas para cada persona. Algunos esperan todo el año, de forma impaciente, y ahorrando cuanto se pueda, para embarcarse en un viaje soñado, lejos de la bulliciosa ciudad en la que viven, para así esperar encontrar algo de paz. En mi caso particular, la situación es completamente opuesta. No hay nada que me reconforte más que quedarme en mi casa, tranquilo, en mi ciudad, y disfrutar de los pequeños placeres que esconde, ya que, durante los meses de trabajo, no puedo aprovechar al cien por cien de las bellezas locales. Pero ¿qué representa el verano y cómo serian unas vacaciones ideales? Seguramente, si hay algo que nunca puede llegar a faltar en un oasis de relajación y paz son unos buenos libros… ¿Estáis de acuerdo conmigo? Dejadme que os cuente algo más sobre mí y el verano… y sobre qué libros os aconsejo leer para estos cálidos meses que nos esperan a lo largo del verano 2021. ¿Cuáles son los planes para el verano ideales? Soy una persona que no tiene por costumbre salir a veranear o irse de viaje a otro lugar. ¡Tengo la suerte de vivir en uno prestigioso, con un clima cálido y agradable, que se encuentra rodeado de más de 30 playas! Por lo tanto, no me surge esa necesidad de huir del alboroto propio de las grandes ciudades. A tan solo unos minutos de distancia, ya puedo disfrutar de un paisaje paradisiaco sin alejarme demasiado de mi hogar. Con respecto a las costumbres y a lo que estoy acostumbrado a hacer durante las vacaciones, me encanta poder ver a mi familiares y gozar de la compañía de ellos, en especial de mi hijo. Ya que vivimos lejos, aprovecho al máximo esos días libres para rodearme de su presencia, descansar y disfrutar juntos. De hecho, dedico todo un mes exclusivamente a compartir mi tiempo con él y hacer lo que nos surja en el momento. La espontaneidad que hay en el vínculo entre nosotros es clave y es algo que aprecio mucho de nuestra relación. No hay presiones ni obligaciones, simplemente hacer lo que nos apetezca en el momento. Las pequeñas cosas de la vida van primero La verdad es que no busco nada muy extraordinario ni aventurero, tan solo presenciar los momentos de la vida diaria. Uno pierde muchas cosas al estar lejos de su familia, por eso aprecio, más que nada, las cosas simples, la cotidianidad, y poder verlos todos los días. Algo tan sencillo como sentarme a tomar el desayuno con mi hijo, salir a caminar y dar un paseo por la playa, ir a alguna excursión, hablar por horas y horas, es algo tan natural como especial que realmente me reconforta. ¿Cuál sería vuestro plan de verano perfecto? ¿Se asemeja al mío? ¿O sois más parecidos a un personaje de una novela de aventuras? Claro está que, además de la familia y la tranquilidad, otro elemento que no puede faltar en mi verano son los libros. Mi próxima lectura bajo el sol Como gran apasionado de la lectura, por lo general, me entusiasmo leyendo más de un libro a la vez. Por esa razón, las vacaciones son un excelente momento para ponerme al día con aquellas lecturas que dejé atrasadas. Terminar unos libros que tenía pendientes, y comenzar otros que han llamado mi atención. Este verano, he decidido empezar a leer un libro que me tiene muy curioso, llamado “Espiritismo Digital“, de Ivan Mourin, quién, además de ser escritor, es también criminólogo. Este libro es un ensayo sobre la sorprendente conexión entre el mundo paranormal y las nuevas tecnologías, tratando desde el poder del imaginario colectivo en internet hasta los nuevos métodos de investigación. ¡Me parece realmente un tema fascinante! Algunas de mis novelas para veranear Para los aficionados de los libros como yo, las vacaciones son una ocasión oportuna para volver a coger esos libros que hemos abandonado por ahí, encima de la biblioteca o arriba de una mesa, acumulando polvo. Dejando la humildad de lado, os voy a recomendar dos libros de mi autoría que, creo, van en perfecta sintonía con el clima de relax característico de las vacaciones. Os dejo una breve sinopsis de ambas. Como primera recomendación, la novela “Muerte y Cenizas” ,que se encuentra situada en la época del Imperio Romano, en Hispania. La historia comprende a un investigador que es abogado, unos incendios que están destrozando la ciudad, muertes extrañas, y muchos otros elementos que se conjugan, creando un verdadero misterio. En este relato, acompañarás a un joven abogado en una investigación en la que nada es lo que parece, donde su vida está en peligro, y el Imperio está siendo gravemente amenazado. Por otra parte, la segunda novela se titula “La Boca del Diablo” ,que siempre he definido como la fusión entre dos de mis grandes pasiones: la novela histórica y las historias de espíritus y posesiones. Los dos personajes principales son inquisidores y diametralmente opuestos; mientras uno es un fiel seguidor de la doctrina inquisitorial, el otro es un amante del uso de la razon, el conocimiento empírico y la verdad. ¡No pretendo explayarme mucho más, así no cometo ningún “spoiler“, por lo tanto, si queréis averiguar qué sucederá en una villa plagada de acontecimientos demoniacos, deberéis averiguarlo por vosotros mismos! ¡El verano es para desconectar y disfrutar! He recomendado estas lecturas para el verano por creerlas amenas y ligeras. De todas las novelas que he escrito, personalmente creo que son las más ágiles y fáciles de leer, ya que pertenecen al género de investigación histórica. Tanto si te de vacaciones en un viaje, muy lejos de casa, o si, como yo, prefieres la comodidad de tu hogar y tu ciudad (pero con menos responsabilidades), lo fundamental es no forzar actividades no deseadas ni itinerarios fastidiosos que limiten y condicionen lo que verdaderamente quieres hacer. Seamos honestos con nosotros mismos, ya que la palabra “vacaciones” no es igual para todo el mundo. ¡Que cada persona disfrute
¿Qué llevar a una isla desierta?
Imagínate que, por una razón u otra, terminas en una isla desierta. Puede ser que llegues a ella de manera inesperada, a través de un avión, como en “El señor de las moscas“; o viajando en tu barco, por las costas exóticas de un país tropical; o incluso por arte de magia: una mañana abres los ojos y te despiertas dormido bajo un cocotero. Antes de terminar en ese pequeño territorio, hecho de arena y selva, tienes la posibilidad de escoger algunas cosas que puedes llevarte para que te ayuden y te hagan compañía durante tu estancia en la isla. Este es el escenario: estás a punto de pasar un largo tiempo en una isla desierta, no hay literalmente nada ahí, excepto las necesidades básicas de supervivencia. Puedes llevar lo que quieras… ¿Qué escogerías? Yo hoy me quedé pensando y desatando la imaginación, para viajar con la mente hacia esa isla. Escogí lo que me llevaría conmigo y os los voy a compartir… pero, antes, me gustaría analizar, con mayor atención, el fenómeno de la isla desierta en algunas famosas obras literarias. Estoy seguro de que ya sabéis cuál es uno de los libros por excelencia que va a aparecer en el siguiente párrafo. ¡Vamos allá! La aventura a una isla desierta en los libros En el mundo de la literatura se han escrito numerosos libros que abarcan esta temática. De manera completamente impredecible, el, o los protagonistas, se hallan varados en un lugar totalmente desconocido y salvaje, teniendo que sobrevivir en un nuevo y emocionante contexto. A menudo, este escenario se transforma en una increíble aventura. Sea que los protagonistas se ingenien para sobrevivir o sea que esa isla represente una fuga de la realidad cotidiana, en ambas situaciones, esta experiencia permite a los personajes conocerse mejor y descubrir no solo aspectos del entorno, sino también de la naturaleza del propio hombre y, por supuesto, sobre ellos mismos. Uno de los libros que, automáticamente, se nos viene a la mente cuando pensamos en islas, es el gran clásico de Daniel Defoe, “Robinson Crusoe“. La obra más famosa del aclamado escritor inglés, trata acerca de un marino de York que se embarca en una expedición hacia África. En resumidas cuentas, el protagonista es capturado por unos piratas que lo convierten en esclavo. Él logra escapar gracias a la ayuda de un marinero portugués. Paradójicamente, decide volver a África para asistir a otros grupos de inmigrantes. ¡Toda una aventura que nos acompaña a muchos desde muy pequeños! Cualquiera que sea la novela que abarque este tema, cuando se trata de aventuras, todas comparten algo en común: la urgente necesidad de superar el shock inicial e ir a lo importante, que es aplicar al máximo el instinto de supervivencia para salir con vida y sacar lo mejor de la situación en la que se encuentran, con la esperanza de, algún día, ser rescatados. Son un ejemplo de libros de este tipo la novela juvenil “El señor de las moscas, de William Golding, o el magnífico libro de Jules Verne “La isla misteriosa“. La isla desierta como fuga de la realidad Pero existen también otras obras que tratan este tema desde otra perspectiva, como la del autor argentino Roberto Arlt, llamada “La isla desierta“. Aquí, la isla tiene la función de metáfora, en la que unos hombres, cansados de la vida cotidiana en una oficina, deciden escapar, con el poder de la imaginación, hacia una isla, hasta que se dejan llevar tanto que empiezan a hacer danzas tribales. Intentando ponerme en los zapatos de estos protagonistas, me surge la siguiente pregunta fundamental. ¿Qué llevaría conmigo? Si tuviera que elegir qué llevaría a una isla desierta, serían diez libros y diez objetos que me serían de gran utilidad una vez que estuviera allí. Dos de ellos serían “El Señor de los anillos” y “El Hobbit“, ambos del gran escritor J. R. R Tolkien, a quien admiro profundamente, y que es considerado el padre de la literatura fantástica moderna. Otro libro que escogería seria “Shogun“, la novela histórica de James Clavell. Esta historia se desarrolla en la época feudal de Japón, alrededor del año 1600. Gira en torno a las aventuras del marinero inglés llamado Blackthorne, que es capturado por los japoneses al arribar a sus costas. En sí, la novela trata sobre cómo Tokugawa Ieyasu logró convertirse en shogūn (emperador) de su país, y fundar una dinastía que se extendería hasta el siglo XIX. Para no alargarme demasiado, haré un listado del resto de los libros que llevaría conmigo a esta travesía. Los mismos han sido elegidos, no únicamente por gusto propio, sino porque, además, considero que muchos de ellos podrían orientarme e, incluso, serme útil a la hora de ingeniármelas para sobrevivir. Estos serían: “El médico“, de Noah Gordon; “Los pilares de la tierra“, de Ken Follet; “León Bocanegra“, de Alberto Vázquez Figueroa; “Ben- Hur“, de Lewis Wallace; “Momo” y “La historia interminable“, de Michael Ende, y, por último, “Ivanhoe“, del escocés Walter Scott. No solamente cosas… Con respecto a los objetos que me llevaría a una isla desierta, y teniendo en cuenta la experiencia previa de todos aquellos protagonistas que han quedado varados en lugares inhóspitos, me siento más que preparado para saber exactamente lo que debería acarrear conmigo. Ante todo, llevaría un teléfono capaz de conectarse vía satélite para poder comunicarme con mi familia y amigos, ya que no puedo prescindir de ellos… También la comida y la bebida son imprescindibles, considerando que, en dicho lugar, quizás no haya absolutamente nada para comer, o peor: si hay frutos u hongos, podría correr el riesgo de que fueran venenosos. ¡Y espero jamás encontrarme un lugar con animales salvajes capaces de cazarme! Para dormir cómodamente, me llevaría un buen colchón, y mantas, en caso de que a la noche hiciera frío. A la hora de disfrutar del día, cargaría siempre un protector solar para cuidarme del sol intenso. Asimismo, una cámara fotográfica sería ideal para capturar esos paisajes exóticos y nunca antes
Cómo elegir tu próxima lectura
Si habéis desarrollado el hábito de la lectura y lo consideráis un pasatiempo esencial en vuestra vida, ya habréis pasado por esa etapa en el que el libro que estabais leyendo llega a su fin. En momentos como estos, os puede llegar a invadir cierta tristeza por haber terminado aquel libro que os estuvo acompañando por un tiempo; y es por esta razón que es importante actuar y encontrar el próximo texto que os enamorará nuevamente. Escoger entre miles de opciones no es nada fácil, ya que queremos que el libro cumpla con nuestras expectativas, o que incluso logre superarlas. Ahora bien, no hay que generar presión ni hacer que uno se sienta mal si ha elegido un libro que no resultó ser como lo había esperado. De toda lectura, algo se aprende, y leer nunca es tiempo echado a perder. Sin embargo, hay una serie de recomendaciones que os voy a compartir para ayudaros en esta tarea, y para que podáis cumplir con vuestras necesidades y expectativas literarias. Vayamos por orden. ¿Qué libro puede ser el adecuado para mí? Esta es la primera pregunta que, posiblemente, os planteéis, y, aunque no existan libros obligatorios, optar por los clásicos siempre puede ser un buen comienzo en la lectura. Otra buena forma de empezar la búsqueda hacia una nueva apuesta literaria es dividir las posibles obras en dos secciones mayores: una es la ficción, y, la otra, la no ficción. A partir de este punto, la búsqueda se hará bastante más sencilla y ágil, ya que pueden surgir preguntas más específicas, como “¿Prefiero leer una novela romántica? ¿O cuentos de literatura fantástica? ¿O quizás esté más interesado en leer relatos o novelas históricas? ¿O, incluso, algún texto de divulgación científica?” Esta división es un excelente parteaguas, que os guiará más naturalmente hacia ese libro que tanto habéis estado anhelando leer. Cuando este punto ya esté aclarado, será posible explorar las posibilidades que ofrecen la infinidad de autores disponibles en el mercado. Siempre hay muchísimo material literario excelente que os espera para ser descubierto. Por otro lado, podéis dejaros llevar por el libro o el autor más vendido del momento, ese que está en todas las vidrieras de las librerías más importantes, siempre teniendo en cuenta de que el hecho de que sea un best-seller no lo convierte en automático en el libro que estáis buscando, pero puede ser una opción, ¡así que tenedlo en cuenta! Para dar con el libro perfecto, tenéis que aventuraros en una búsqueda real y profunda entre cientos de tesoros por descubrir. Una elección muy personal del momento El hecho de seleccionar un libro es algo tan personal como cualquiera de las elecciones que tomamos en la vida cotidiana. Por esto, es fundamental que os conozcáis; solamente vosotros podréis decidir qué libro es el correcto. Dependiendo de varios factores y, además, que optéis por un género, no quita el hecho de que os disguste otro. Pero, en mi opinión personal, el libro elegido se relaciona enormemente con el momento de la vida por el que estáis transitando. En ocasiones, puede que necesitéis un libro que os “hable“. Un libro que mantenga encendido vuestro interés, pero también vuestro espíritu, y, por supuesto, vuestra curiosidad. Por otro lado, hay quienes optan por libros de entretenimiento, para pasar el rato; otras personas, se inclinan por los que les ayuden a crecer como individuos, como, por ejemplo, sobre la espiritualidad y la superación. Mientras que, en algunas etapas de nuestra vida, preferimos viajar hacia otros mundos y dejarnos llevar por la imaginación a través de novelas de todo tipo, ya sean fantásticas, distópicas, románticas o históricas. Todo depende del momento en el que os encontréis a nivel personal. Un paseo por las librerías, a vuestro ritmo Hallar el libro ideal no debería ser una tarea rápida y apurada. Nadie os apresura y, por ello, tomarse el tiempo para hacerlo es fundamental. Para ello, podréis ir a una librería que os guste y pasar allí todo el tiempo que necesitéis, recorriendo y explorando géneros y estanterías. Seguramente, habrá algún libro que capte vuestra atención. Aunque, si en la primera librería no encontráis nada que sea de vuestro interés, ¡a no desesperar! ¡Ya llegará! Por otro extremo, a veces puede suceder que el entusiasmo os impulse a comprar más de un libro… ¡Maravilloso! No hay porqué limitarse a comprar solo uno. En este caso, si no estáis seguros por cuál empezar, mi recomendación es que leáis la contraportada de cada uno de ellos para entender el tema predominante y dejaros llevar por el que más os inspire en aquel momento. Los hogares también pueden esconder tesoros El libro perfecto, muchas veces, puede estar en frente de nosotros. Como escribió Antoine de Saint-Exupéry: Lo esencial es invisible a los ojos. ¿Cuántos libros sin leer tenéis en vuestra casa? De esos que solo se dedican a acumular polvo y espacio, que siempre han estado allí, pero, por un motivo u otro, jamás les habéis echado un vistazo, o los habéis siquiera considerado. La casa de cada uno puede ser de gran ayuda a la hora de escoger qué leer. Además, si vivís en una casa con vuestra familia o con más de una persona, os sorprenderéis al encontrar la inmensa variedad de libros que pueden hallarse abandonados por las estanterías dedicadas a la lectura de vuestro hogar. Pídele un consejo a alguien que te conozca Este es mi caballo de batalla. Pedirle recomendación a los familiares o amigos es una gran alternativa que os abrirá aún más las puertas a otro tipo de libros. Libros que quizás jamás hubierais considerado leer y, mucho menos, comprar. Sin embargo, son justamente aquellas personas que nos conocen las que pueden llegar a darnos el mejor consejo. En mi caso, por ejemplo, mi editora siempre me sugiere lecturas estupendas que disfruto muchísimo. Alguien con un gusto parecido al vuestro o que os conoce, ¡podría dar en el clavo en un momento! No existe una regla general para la lectura
Libros para mejorar el medio ambiente
El día de hoy tiene como objetivo concienciar y recordar a las personas la importancia del cuidado del entorno en el cual vivimos. El día fue escogido por las Naciones Unidas en su resolución, el 15 de diciembre de 1977. Pero se trata de un evento que se festeja desde el 1974, cuando tuvo lugar la Conferencia de Estocolmo, cuyo tema principal fue: “¿qué es lo que podemos hacer para cuidar del planeta?”. Tras un par de jornadas en la Asamblea General de la ONU, se aprobó la creación del PNUMA: el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. Así que no se trata de una fecha cualquiera, sino de un momento de suma importancia en el que me gustaría haceros reflexionar. Como personas que habitamos este planeta, es fundamental que seamos conscientes de su explotación. Sin embargo, nosotros también podemos aportar nuestro granito de arena. Uno, a veces, no sabe por dónde empezar o no entiende bien de qué se trata todo el movimiento ecologista. Por suerte, hay una infinidad de libros que nos pueden explicar detalladamente sobre la situación del planeta y, por supuesto, darnos consejos sobre qué hacer para contribuir a la causa ambiental. Espero que las siguientes lecturas os sean de inspiración para crear nuevos hábitos verdes. “Residuo 0 en casa: Guía doméstica para simplificar nuestra vida”, de Bea Johnson El primer libro que os invito a leer es “Residuo 0“, de Bea Johnson. Muchos de nosotros no sabemos por cuál camino comenzar nuestra jornada hacia una vida más sostenible; aunque tengamos la voluntad de llevarlo a cabo, a veces también existe el miedo a hacer algo mal. Por este motivo, la guía de residuo cero es ideal para principiantes. La autora no es nada más ni nada menos que la creadora del movimiento zero waste. Fue ella quien le otorgo este nombre y lo hizo popular. Consiste en intentar reducir nuestra basura tanto como sea posible. Johnson relata cómo fue el proceso para ella, los obstáculos y las soluciones. Fue capaz de lograr la completa eliminación de basura en su vida, al rechazar los plásticos y todo eso que esta “de más” en un producto, como el empaquetamiento innecesario, por alternativas y materiales nobles que duran muchísimo más tiempo y pueden reutilizarse. Por ejemplo, cepillos de dientes de bambú, botellas de aluminio en lugar de las de plástico… Ha sido un best-seller y un éxito total que se ha traducido a más de 10 lenguas. Sin lugar a dudas, si no sabes por dónde empezar, este libro es un buen comienzo. “El mundo sin nosotros”, de Alan Weisman Este segundo libro que os presento, nos sitúa en un mundo sin humanos, luego de su completa desaparición. Plantea cómo sería la Tierra si, de repente, un día nos extinguiéramos. Explica de qué manera los edificios y las construcciones se hundirían, o cuánto tiempo tardarían las ciudades más importantes del mundo, como Nueva York, en reforestarse y ser devoradas por la vegetación. A su vez, indica cuáles de los objetos que utilizamos a diario se preservarían por cientos de años y cuáles quedarían como fósiles. Hace hincapié en el plástico, por excelencia, uno de los materiales más perjudiciales para el entorno, y que se ha transformado en objeto de polémicas para reducir y evitar su uso, solicitando a las marcas que dejen de emplearlo y lo reemplacen por vidrio u otros materiales que pueden reutilizarse. Busca que las personas tomen conciencia de los devastadores efectos de nuestro consumo en la naturaleza y nos replanteemos cuán necesarios somos en el mundo si contrastamos esta idea con cuán dañinos somos realmente. “Tu consumo puede cambiar el mundo”, de Brenda Chávez Lo curioso de la autora Brenda Chávez es que, en sus comienzos, trabajó como escritora freelance para aclamadas revistas de moda, como Elle y Vogue. Sin embargo, luego de escribir artículos sobre arte, diseño y pasarelas, decidió indagar acerca del proceso productivo de estas áreas. En ese momento, descubrió el cruel “backstage” de los modos de producción, pero también el mundo de la sustentabilidad. Afirma que, en cada acto de consumo, estamos apoyando económicamente a una manera de producir que puede perjudicar o respetar a la naturaleza. Allí se encuentra la clave para entender que nuestras decisiones acerca de lo que consumimos importan. Podemos hacer una compra cotidiana, pero con una mirada crítica, repensando y analizando de dónde provienen los productos que adquirimos. Apostar por un consumo ético, responsable ecológicamente y de comercio justo, logrará ese cambio en un sistema que quiere hacernos creer que es inalterable. “La sexta extinción: una historia nada natural”, de Elisabeth Kolbert Ha habido 5 extinciones masivas desde que la tierra se creó, hace millones de años. Ya sea por asteroides o desastres climáticos, las especies se han ido extinguiendo como consecuencia de estos sucesos naturales. No obstante, la sexta extinción es una muy particular, ya que nos interpela porque nosotros tenemos un rol protagonista en la misma. En este fascinante libro, Kolbert nos invita a reflexionar acerca de qué significa ser humano y nuestra relación con la naturaleza. Ha investigado en profundidad la labor de especialistas de variadas disciplinas, como geología y biología marina. Nos introduce a decenas de especies que han desaparecido, como el rinoceronte de Sumatra, la rana dorada de Panamá y muchas otras en grave peligro de extinción. Según los cálculos de la periodista y escritora, para el fin de año del siglo XXI, se habrá extinguido el 20% de las especies que habitan el planeta hoy en día. Estas predicciones alarmantes sirven para evaluar el impacto de la existencia del hombre moderno y su relación con el medio ambiente, para orientarla hacia un vínculo más sano y amable con el entorno. “Esto lo cambia todo”, de Naomi Klein La aclamada escritora y periodista canadiense Naomi Klein, en su cuarto libro, “Esto lo cambia todo“, propone no quedarse en el molde como simples espectadores y exigir a la clase política que revean sus intereses económicos, enfocándose en el
Mitología y novela histórica, grandes aliados
¿Qué os viene a la cabeza si hablo de semidioses, unicornios, dragones, lamias o sirenas? ¿Que vamos a jugar a World of Warcraft? Pues no. Os estoy hablando de mitología y novela histórica. Vale, ahora sí que os he descuadrado los esquemas por completo. Pero ¿la novela histórica no es ese género serio (en ocasiones, demasiado) basado en un tiempo o época real, cimentado en historia veraz, y no en cuentos para niños? Sí, así es. Y por eso, me atrevo a deciros que los personajes fantásticos o seres mitológicos, habidos y por haber, tienen cabida en este género. Antes de que os entre en combustión la cabeza con mis afirmaciones, y empecéis a cortocircuitaros, dejad que os explique el porqué de estas palabras, mencionando algún ejemplo de mitología y novela histórica. SERES MITOLÓGICOS. ¿QUÉ SON? Todos hemos oído hablar de ellos. Los seres mitológicos son criaturas con poderes sobrenaturales, capaces de controlar elementos que escapan al ser humano. Tenemos el elenco de la mitología griega. Semidioses, como Hércules. Relatos como el de Perseo, que acabó matando a Medusa, un ser mitológico con la cabeza llena de serpientes, capaz de petrificar a los hombres con una simple mirada. Y es que aunar Grecia antigua con mitología y novela histórica es un clásico. Encontrareis un ejemplo fantástico aquí. Más adelantados en el tiempo, hallamos mitos sobre los cazadores de unicornios. Esos enigmáticos seres mitológicos, de brillante y colorido pelaje, con un cuerno mágico en la frente, tan codiciado durante el medievo por sus supuestas propiedades sobrenaturales. Esto llevó a osados aventureros a expediciones en su búsqueda por los lugares más recónditos del continente africano. Imaginad hasta qué punto se creía en su existencia, que los vikingos (más listos que nadie), supieron hacer negocio de esa creencia comerciando con cuernos de narvales como si de unicornios se tratase. Y, sin entrar en detalles sobre estos nórdicos espabilados, solo dejaré caer una reflexión que acaba de asaltarme: mitología y novela histórica nórdica. Os suena, ¿verdad? Quien no conozca a Odín y el Valhalla, que cierre la puerta al salir. ¿Y LOS DRAGONES? ¿QUÉ ME DECÍS DE LOS DRAGONES? El dragón, un reptil de grandes dimensiones, es uno de los seres mitológicos por excelencia. Al igual que sucedió con el unicornio, en su día fue incluso estandarte de poderosas casas reales, como símbolo de grandeza y poder. Incluso se llegó a comerciar con partes de otros reptiles (cocodrilos o restos fósiles de dinosaurios), como si de trozos de esta criatura se tratase. ¿Quién no ha oído hablar de la leyenda de San Jordi? Un gallardo caballero que mata a un dragón para salvar a la princesa, y la bonita tradición, que aún se conserva en Cataluña, de regalar una rosa a nuestros seres queridos, para recordar el rosal que, supuestamente, brotó del pecho del dragón al ser herido de muerte. No me digáis que mitología y novela histórica no son un tándem genial con semejante criatura alada. HABLEMOS AHORA DE SIRENAS ¿Existieron? ¿Embaucaban a pobres marineros por el simple placer de matarlos? Pues, a pesar de que afamados navegantes, como Cristóbal Colon, reconocieron haberse topado con ellas en alguno de sus viajes, en realidad se cree que esas extrañas criaturas, con las que tenían locos delirios en sus travesías ,no eran sirenas, sino manatíes. Menuda decepción, ¿eh? Otro filón para hacer navegar, viento en popa, mitología y novela histórica. Dediquemos unas líneas a las lamias, esas malvadas féminas que se alimentaban de la sangre de inocentes criaturas. Podemos decir que la creencia en estos seres mitológicos estaba tan arraigada en la antigüedad que incluso se llegó a condenar a mujeres a la horca o al destierro, acusadas de transformarse durante la noche en semejante aberración. Pero, como habrá escépticos que seguirán dudando sobre la racionalidad de ayuntar mitología y novela histórica, veamos un buen ejemplo. ¿CÓMO MEZCLAMOS TODO ESTO CON NOVELA HISTÓRICA? ¿Hay autores que hayan hecho semejante mezcla explosiva con buenos resultados? Pues sí, haberlos haylos, y un muy buen ejemplo es Javier Pellicer. Este reconocido autor mezcla en sus novelas la mitología como una parte fundamental de la historia. Tomemos por caso su último libro: Lerna, el legado del Minotauro. Tan solo el título ya nos deja claro que aquí hay mitología y novela histórica de la buena. Ambientada en la lejana Edad de Bronce, esta novela, aúna dos grandes historias llenas de mitología: la Creta minoica, de cuyas leyendas se apropió la Grecia clásica, y los mitos fundacionales de Irlanda, recogidos en el Libro de las Invasiones. Una épica odisea que rebosa aventuras y emociones, que gira en torno a un tema jamás antes abordado en literatura: el gran viaje de los Hijos de Partolón. Y esto no lo digo yo, lo dice la propia editorial Edhasa, y podéis leerlo vosotros mismos aquí. Para apreciar esa fusión entre mitología y novela histórica, debemos olvidarnos de nuestra mentalidad actual, basada en el razonamiento científico. Aquí existe un estricto proceso de deducción, sin dar cabida a la intuición ni la imaginación, y donde estos seres mitológicos nos parecen poco más que personajes de cuento. Pensemos que, en una época pasada, en la que no había los conocimientos científicos de hoy en día, donde a la mayoría de los sucesos no tenían explicación, y las leyendas o cuentos se transmitían de generación en generación, avivando la llama de la superstición, todo podía acabar enmarcado con algún ser mitológico como causante de cualquier acontecimiento inexplicable. No caigamos en el error de tachar de pobres crédulos a nuestros ancestros. Entendamos más bien su forma de vida, la limitación del mundo que les rodeaba, en la cual la mayoría nacían, crecían y morían, analfabetos y sin tan siquiera salir de su poblado o aldea. Ese es el ambiente propicio para tejer una novela en la que los seres mitológicos sean personajes bien avenidos con la trama, puesto que no es descabellado que los protagonistas de nuestra historia crean en ellos como reales. De hecho, si nos ceñimos a