Si estás leyendo mi blog, estoy seguro de que ya sabes que mis lecturas predilectas son las novelas históricas. No solo las empecé a leer desde muy temprana edad, sino que, gracias a grandes escritores del género, como Walter Scott y Robert Louis Stevenson, me he entusiasmado por la lectura. He aprendido a conocerme a mí mismo, y he descubierto mi deseo más profundo: querer ser escritor de ese tipo de novelas, las que más me han apasionado durante mi infancia, adolescencia y vida adulta.
Pero más allá de los motivos que me han llevado a ser escritor de este género, hoy quiero compartir contigo mi visión como lector, ¡y las cinco razones por las cuales deberías empezar a leer (o continuar leyendo) novelas históricas!
Con las novelas históricas podrás viajar en el tiempo y en el espacio
Empezar una novela histórica es un poco como entrar en una máquina del tiempo. Te estás dando la posibilidad de comenzar una aventura hacia otra época y lugar. Y digamos la verdad: ¿quién no ha deseado viajar en el tiempo y en el espacio al menos una vez en su vida?
Gracias a la investigación llevada a cabo por los escritores de novelas históricas, y la mezcla entre ficción y realidad, podrás visualizar por primera vez esos eventos que antes parecían tan lejanos de tu presente.
¿Qué otras posibilidades tienes de regalarte una expedición en una realidad remota y desconocida? Además, lo mejor de todo es que es un viaje que puedes emprender por un precio muy barato, estés donde estés y en cualquier momento del día.
Descubrirás personajes históricos (casi) desconocidos
Este es uno de los aspectos para mí más fascinantes de la novela histórica: conocer a los personajes.
En los libros de texto, así como en las calles de las ciudades en las que vivimos, retumban nombres que todos conocemos de memoria. Nombres que han sido esenciales en el desarrollo del presente, tal y como lo conocemos hoy en día. Pero el aspecto más curioso de estos nombres es que rara vez sabemos realmente a quiénes pertenecieron.
¿Quiénes fueron realmente esos hombres y mujeres que terminaron siendo tan famosos? ¿Y aquellos otros desconocidos que también fueron importantes, a su manera, pero que nunca recibieron un monumento o una insignia que los recuerde brevemente en la vía de un pueblo o una ciudad?
Las novelas históricas nos permiten conectar nuevamente con las historias de aquellos personajes que terminan siendo, de alguna manera, unos desconocidos, ya sean estos famosos o no. A través de esta máquina del tiempo, podemos ofrecerles la posibilidad a estos personajes de presentarse bajo diferentes perspectivas y puntos de vista para que, finalmente, sepamos quiénes fueron.
Además, puede que descubras que entre tú y uno de los reyes de la Antigua Roma, o una princesa Egipcia, quizás no haya tantas diferencias. La esencia de la humanidad no cambia con el tiempo.
Gracias a las novelas históricas comprenderás mejor a los humanos
La novela histórica también nos enseña a conocer mejor a los humanos y, por ende, a nosotros mismos, mostrándonos que la naturaleza humana, y los eventos creados por la misma, no cambian tanto con el tiempo.
Al fin y al cabo, por mucho que hayamos avanzado y evolucionado a lo largo de la historia de la humanidad, hay características que nos definen desde siempre. Por ejemplo, todos los seres humanos compartimos emociones, como el miedo, la rabia, la felicidad y el amor. O nos asociamos los unos con los otros a través de valores primarios comunes. Entre los más fundamentales, cabe destacar el instinto de supervivencia dentro de cada uno de nosotros y la importancia que tiene formar vínculos con aquellos que nos rodean.
Estos mismos rasgos nos hacen humanos y nos conducen a repetir determinadas pautas, una y otra vez. Así que las novelas históricas ayudan a darnos cuenta de que la historia tiene tendencia a repetirse con el tiempo, siguiendo un mismo patrón.
Tomar conciencia de este aspecto te permitirá expandir tu comprensión personal, no solo sobre nuestra evolución, sino también sobre aspectos más personales y profundos, como la fragilidad y la fuerza que residen en todos los seres humanos, y en sus historias personales que, tomadas en conjunto, forman la gran historia que nos une como especie.
Aprenderás historia estimulando a tu imaginación
No importa si eres una de esas personas a las que nunca le ha gustado la asignatura de historia en el colegio o si siempre has sido un apasionado historiador: leer novelas históricas te permitirá empatizar con el contexto, dándote algo más que únicamente fechas y nombres.
De hecho, como ya he dicho muchas veces, la novela histórica no es una reproducción fiel de los acontecimientos históricos, ni pretende serlo. En este tipo de novelas, no aprenderás todos los hechos históricos de un momento en concreto, sino que empezarás a imaginar el contexto que el autor de la novela ha recreado para ti.
Dejándote llevar por la lectura, serás capaz también de asumir con tu conciencia los acontecimientos que ocurrieron en el pasado, entrando en tu imaginación y en la del escritor. Y lo mejor de todo es que muy seguramente termines por adentrarte tanto en la historia que te sorprendas a ti mismo, apasionado e investigando por tu cuenta sobre ese determinado evento histórico.
Si le das una posibilidad, verás que este tipo de novelas te ayudarán a poner la historia en una perspectiva más cercana a la de tu vida actual, estimulando a tu bagaje de conocimientos.
Por último, pero no menos importante, lo pasarás bien
La novela histórica cambia las dinámicas del espacio y del tiempo, haciéndonos conocer a personas, épocas y lugares que ya se dieron, de una manera dinámica y divertida.
Lo bueno es que este subgénero tiene posibilidades para todos los gustos, así que es realmente imposible que no encuentres esa época histórica que te fascinará.
Está claro que esta es mi opinión personal, pero para mí no hay nada mejor que alimentar mi curiosidad, dejándome guiar por la brújula del escritor dentro de aquel fascinante pasado desconocido.
